El rey persa Jerjes (Asuero) y la reina Ester

Inmediatamente después, Amán se une al rey en un segundo banquete invitado por la reina Ester. Durante el banquete, el rey pregunta a Ester cuál es su deseo, incluso ofreciéndole la mitad de su reino. 

Ester 7: 3

Entonces la reina Ester respondió y dijo: «Oh, rey, si he hallado gracia en tus ojos y si place al rey, que se me conceda la vida: esa es mi petición; y la vida de mi pueblo: ese es mi deseo;

Ester revela su identidad judía y saca a la luz el plan de Amán de exterminar a los judíos. El rey furioso ordena a Amán que se cuelgue en la misma horca que había preparado para Mardoqueo. Asuero emite un edicto opuesto que permite a los judíos defenderse. En el día fijado en el edicto, los judíos alcanzan una gran victoria sobre sus enemigos. Hasta el día de hoy los judíos lo celebran cada año en la fiesta de Purim.

Josefo, Antigüedades 11.6.13

«Mardoqueo también escribió a los judíos... Para que preserven esos días y los celebren como festividad;... Los judíos aún respetan esos días y los llaman los días de Purim».

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